En los noventas viví una época sumamente adictiva a las películas, tuve la dicha que mi hermano y vecino eran unos consumidores compulsivos de cine, el fin de semana nuestra casa se convertía en sala de cine para todos nuestros amigos.

Mi vecino conocido como ´´El Robert´´ trabajaba en un videoclub, el clásico videoclub de barrio, ese donde la comunidad cinéfila se hacía presente los fines de semana para sobrevivir del calor y aburrimiento de Mexicali. El tener un amigo que trabajara en un videoclub era una bendición y un privilegio, podíamos observar primero los estrenos que llegaban, pero también una que otra cinta pirata, estas solo eran para la gente de confianza y conocidos (los VIP).

 

Blockbuster Plaza Catavina

 

Nuestra casa funcionaba como cine club sin querer queriendo, nunca lo asimilamos o visualizamos de esa manera, llegaba el viernes y la emoción me carcomía por saber que películas observaríamos el fin de semana. Estas era por lo general filmes de acción, misterio o terror, el destino y los astros conspiraban para que aquellos VHS llegaran a nuestras manos.

El cuarto de televisión estaba conformado por tres sillones viejos, pero cómodos para resistir los maratones que terminaban hasta altas horas de la noche, una televisión RCA que en aquellos años era respetable, la cual duro años siendo parte de las permanencias voluntarias.

 De las películas que recuerdo y hasta el momento son parte de mi vida son Kids, Trainspotting, Matrix, Wayne´s World, South Park: Bigger, Longer & Uncut, Drácula (Keanu Reeves, El Pasajero 57, entre muchas otras, las cuales fueron contribuyendo a mi adicción por consumir y conocer más cine.

 

Erwan

 

En la actualidad estos recintos han paso al olvido y desaparecido por completo, pocas personas recordamos con nostalgia esas tardes familiares o con los amigos, donde ir a rentar una VHS o DVD era toda una aventura, una experiencia que pocos jóvenes no volverán a experimentar.

Las plataformas de entretenimiento están ocupando el primer lugar de los hogares. El antiguo arte de caminar entre los pasillos e ir revisando paso a paso las películas era un momento de investigación y descubrimiento de nuevos horizontes cinematográficos.